El Omega 3 (EPA y DHA) contribuyen a mejorar y proteger la salud cardiovascular.
Además tiene acción antiinflamatoria y forma parte importante del tejido nervioso y de la retina.
El DHA es un ácido graso esencial que favorece el desarrollo del cerebro y de la visión durante la gestación y los primeros años de vida. Cada cápsula blanda aporta 950 mg de Omega 3.